Competencias idóneas de los CEOs

Este artículo lo escribí junto con un ex socio allá por 2010. Releyéndolo hoy, siento que a nivel macro las competencias descriptas siguen vigentes. Haciendo un “zoom”, algunos temas se han complejizado, como la irrupción de lo digital en el día-a-día de la operación.

Articulo original

En los últimos meses hemos mantenido muchas discusiones con Gerentes Generales y Presidentes de empresa líderes en Argentina sobre cuáles son las competencias idóneas de los CEOs para el año próximo.

Como resultado de dicho proceso hemos llegado a una lista corta de siete competencias, que entendemos son críticas para la gestión activa de una compañía en un contexto de incertidumbre y de alta ambigüedad.

1) Conciencia del entorno externo: requiere que el CEO y su equipo puedan reconocer las tendencias y eventos relevantes fuera y dentro de la organización, de forma de enfocar los recursos financieros y operacionales y el capital humano de la compañía en los temas claves que afectan o afectarán el desempeño de la organización. Brevemente esto implica entender:

  • ¿Quiénes son los clientes de la empresa en el nuevo contexto de mercado, cómo se segmentan, que necesidades insatisfechas tienen?
  • ¿Cuáles son las tendencias locales, regionales y globales que afectan, o pueden afectar al negocio en el corto y mediano plazo?
  • ¿Quiénes son los competidores claves actuales y potenciales del negocio y cómo se debería posicionar el negocio que se gestiona versus dichos competidores?
  • ¿Cuáles son las principales oportunidades identificadas a futuro que permiten ganar una ventaja competitiva sostenible?
  • ¿Cómo se debe alinear la organización y la estrategia a las características y evolución esperada del entorno externo?

2) Liderazgo visionario: la historia nos enseña que el liderazgo en momentos de crisis requiere transmitir una visión no sólo para los siguientes tres meses, sino también para los próximos años. La crisis e incertidumbre puede ser muy profunda, pero eso no significa que haya que sacrificar las aspiraciones ni los objetivos desafiantes a futuro. El rol del CEO líder, es actuar como un misionario para evangelizar a toda la organización, comunicando la visión a futuro en forma clara y motivando y logrando un alto nivel de compromiso y pasión de parte de los empleados.

3) Comunicación abierta: implica que el CEO utilice en forma sistemática diferentes estrategias de comunicación para lograr un clima de comunicación abierta de diferentes ideas y perspectivas y de participación a lo largo de toda la compañía. En este proceso el CEO debe dar el ejemplo en el contacto a nivel personal y a nivel corporativo; con una actitud de solicitud y recepción activa del feedback y una política de puertas abiertas. Es útil recordar que en promedio un mensaje se debe repetir al menos nueve veces antes de que sea entendido por una audiencia. No es común que alguien se queje por un exceso de comunicación.

4) Liderazgo de equipo: supone para el CEO impulsar activamente el trabajo en equipo y facilitar la resolución de conflictos. Eso requiere que el CEO entienda implícitamente cómo manejar y trabajar con diferentes ejecutivos con diversos estilos de trabajo. Debe establecer sistemáticamente condiciones para el logro de equipos de alto desempeño en diversos contextos de negocio. El liderazgo de equipo también requiere gestionar en forma activa el pool de talento en las posiciones claves a través de diferentes acciones que incluyen motivar y retener el talento existente, invertir en desarrollar talento, incorporar nuevo talento y desvincular ejecutivos con bajo desempeño. Es interesante hacer notar que hemos encontrado que solamente un tercio de los CEOs con los que hemos conversado en Argentina, nos han confirmado que sienten que actualmente tienen el equipo ejecutivo deseado en las compañías que dirigen.

5) Delegación y empoderamiento: significa que el CEO comparte la responsabilidad por la toma de decisiones, empujando el proceso de toma de decisiones hacia el nivel óptimo para la compañía. Al mismo tiempo asegura que los ejecutivos que tienen responsabilidades, cuenten con la autoridad, soporte y recursos necesarios para ser exitosos. Busca construir una cultura que comparta el crédito por el éxito y el fracaso, y que recompense la iniciativa a nivel personal y grupal.

6) Obtención de resultados: el CEO debe ser el catalizador en la traducción del los objetivos corporativos en planes bien definidos para la organización y las diferentes unidades de negocio. Mas allá del corto-placismo que genera la crisis actual, el CEO debe definir objetivos ambiciosos y establecer prioridades con claras responsabilidades para asegurar los resultados del negocio en un ambiente con alta ambigüedad. Para el logro de los objetivos definidos debe ser capaz de implementar procesos y sistemas de gestión del desempeño que permitan monitorear el avance de la compañía versus los planes acordados.

7) Modelo ético y de los valores de la compañía: el CEO debe vivir y trasmitir en cada una de sus acciones un comportamiento ético y en línea con los valores y expectativas de la compañía. Debe modelar y promover los valores en todos los niveles de la compañía e influenciar a otros de forma que vivan como propia la cultura de empresa.

por Gustavo Wurzel

 

 

 


Top