El lugar del número uno es un lugar de soledad. Muchos me comentan que a veces pierden el contacto con el día a día, que les es difícil ejercer el poder, pero el comentario que más traen a la mesa, es que tienen poco tiempo para reflexionar y pensar, dado lo abrumadora que son sus agendas.
Por eso a continuación, comparto una serie de preguntas, entre otras, las cuales creo que todo gerente general debería hacerse un par de veces al año.
- ¿Qué voy hacer o estoy haciendo para no convertirme en el tipo de líder que muchas veces critiqué?
- ¿Qué voy hacer o estoy haciendo para no enfermarme con el poder?
- ¿Las personas me respetan por mis cualidades y capacidad o por mi cargo?
- ¿Camino la organización, salgo de mi despacho?
- ¿Mantengo contacto con mis cliente, proveedores, competidores?
- ¿Estoy siendo curioso? ¿Escucho a las personas?
- ¿Reconozco públicamente mis errores? ¿Doy permiso / ejemplo de que aquí es posible equivocarse?
- ¿Estoy aprendiendo? ¿Estoy abierto al aprendizaje?
- ¿Se cómo están y qué quieren mis reportes directos?
- ¿Estoy haciendo el trabajo de otros o estoy delegando todo lo que debo y podría delegar?
- ¿Me tomo el tiempo de ver si en mi equipo tengo a las personas correctas en el lugar correcto que la compañía necesita hoy?
- ¿Estoy conforme con la relación con mi jefe, o con el o los accionistas?
- ¿Sé exactamente qué espera mi jefe o los accionistas de mí?
- ¿Dedico más tiempo a lo estratégico que a lo operativo?
- ¿Cuáles son las tres decisiones estratégicas que debo tomar este año?
- ¿Me reúno con los jóvenes que entran a la compañía, escucho sus sueños, sus ideas?
- ¿Se por qué se van las personas que dejan la compañía?
- ¿Qué hago para cuidarme, centrarme, volver al eje? ¿Cómo renuevo mi energía?
por Daniel Posternak